jueves, 30 de septiembre de 2010

¡¡¡VIVA LA REVOLUCIÓN CIUDADANA!!!


Hoy ha sido un día difícil para el espíritu bolivariano.
Hoy hemos sido testigos de una aventura más del imperio norteamericano asustado ante el avance de la izquierda democrática en la tierra de Bolívar.
Hoy hemos confirmado que la oligarquía latinoamericana sigue intentando cortar el camino a la Revolución Bolivariana, representada en nuestros hermanos ecuatorianos, con el estandarte de la Revolución Ciudadana.
Hoy hemos sentido profundamente el carácter nefasto de la Ultraderecha Ecuatoriana.
Hoy celebramos profundamente el valor del pueblo ecuatoriano; su crecimiento, su sacrificio, a favor de preservar la paz y el progreso.
Hoy sabemos que hay un pueblo armado con el corazón.
Hoy escuchamos al Presidente y Camarada, Rafael  Correa dirigirse a su pueblo y dar gracias por su apoyo, el de casi todos los gobiernos, luego de soportar un secuestro por apátridas, golpistas.
Hoy hemos estado ante la presencia de un presidente valiente.
Hoy hemos estado ante un digno Presidente Bolivariano, que conduce a su pueblo hacia la libertad.
Hoy aprendimos a amar la libertad, y recordamos con tristeza lo que, por ahora, no pudo ser en Honduras.
Hoy estamos ante una traición disfrazada de pueblo, pues se supone que la policía es lo más cercano al pueblo.
Hoy recordamos lo que vivimos en abril de 2002 en nuestro querido país, Venezuela.
Hoy entregamos muertos por y para la democracia bolivariana, en la tierra que guarda por siempre el legado del Gran Mariscal de Ayacucho.
Hoy sentimos que la lucha en Ecuador no podía pagar menor precio. ¡¡¡Hasta la Vida Siempre Compatriotas!!!
Hoy ratificamos que el poder, el verdadero poder, está en el pueblo.
Hoy en nuestro Centenario de la Gesta Emancipadora, el pueblo de Bolívar, de Sucre, de Alfaro, demuestra su dignidad ante la historia.
Hoy, una vez más, hemos derrotado al Imperio, a sus lacayos, gorilas, oligarcas y políticos apátridas que se arrodillan ante las prebendas de la traición.
Hoy celebramos, ha sido un largo día Camaradas; pero la dignidad del pueblo ecuatoriano ha triunfado.
Hoy hemos fortalecido la democracia del continente, especialmente la del hermano país.
Hoy el pueblo venezolano ha demostrado la solidaridad que produce la vivencia de un hecho similar, como el que libramos a diario en nuestra batalla por consolidar la Revolución Socialista Bolivariana.
Hoy asistimos a presenciar como la oposición de los países - incluyendo al nuestro - se regocijaba por lo ocurrido en el hermano país: Ecuador.
Hoy hemos valorado más el inmenso carácter solidario que tiene nuestro Comandante Presidente, Hugo Chávez.
Hoy reconocemos cuanto aprendimos con lo ocurrido al Camarada Manuel Celaya.
Hoy sabemos que los conspiradores son brazos cobardes del mal.
Hoy reconocemos que debemos estar pendientes y vigilantes de nuestra Revolución Bolivariana.
Hoy más que nunca me siento orgulloso de ser bolivariano.
Hoy digo: ¡Viva Ecuador! ¡Viva Correa! ¡Viva la Revolución Ciudadana!

lunes, 27 de septiembre de 2010

¡VIVA EL PARTIDO SOCIALISTA UNIDO DE VENEZUELA (PSUV)!

A propósito de las elecciones parlamentarias, ayer pudimos confirmar el carácter democrático de la Revolución Socialista  Bolivariana.
Maravillosa fue la demostración del pueblo venezolano que, pese a la lluvia, y las amenazas y malos presagios que vaticinaba la oposición, acudió a las mesas electorales a apoyar la democracia bolivariana.
No se puede esperar menos de un pueblo que busca liberarse de sus opresores cuartos republicanos.
Pero es prematuro cantar victoria,  todavía queda mucho por hacer, sobre todo por inventar, como nos lo recuerda cada día el Gran Maestro de América, Simón Rodríguez.
Ayer, también pudimos ver a una oposición que decidió volver a la democracia, ojalá y sea para siempre; que se olvide de golpes de estado y gane, pero apostando a la democracia, al civismo y a la participación protagónica.
Todavía hay quienes creen en ellos y eso se les respeta.
Pero, repito, ojalá y no sea un espejismo democrático y estos señores y señoras se olviden - cosa difícil de creer - de los caminos verdes hacia el poder.
Felicito a los camaradas del PSUV, especialmente a quienes trabajaron sin descanso por el triunfo, sí, porque fue un triunfo. La jornada electoral era, como lo ha sido durante  estos 11 años: una batalla de David contra Goliat, y todos sabemos quién es el gigante: el imperio; y quiénes; sus lacayos: los apátridas venezolanos, agrupados en la mesa de la ultra derecha.
Por eso los facilito amigos, hermanos del partido -  nuestro partido – que una vez más ratifica que es el número uno de la política venezolana.
 Los otros micros partidos son el producto de esa unión malsana que está lejos del pueblo y sirve a la oligarquía.
Adelante compatriotas, el triunfo, si bien como dijo el jefe de campaña del Comando Bolívar 200, el Camarada Aristóbulo: “no logramos lo que esperábamos”, pero ha sido un gran triunfo.
También lo ha reconocido nuestro máximo líder.  
Chávez, nuestro Comandante Presidente, no tendrá problemas en seguir gobernando, y profundizar la Revolución por medio de las leyes que faltan.
La oposición no logrará revertir lo alcanzado por la Revolución.
Recuerden que en la actual asamblea existe oposición, sí, y traidora por demás, pues llegó allí gracias a nuestro voto.
En la que se instalará el año próximo, nada será extraño.
En todo caso, lo único extraño será verlos actuando en democracia, por fin.
 Dios nos ayude, y que estos y estas señoras  hagan su trabajo a favor del pueblo, como lo ha hecho la Revolución Bonita.
¡¡¡Felicidades a todos. Felicito a quienes sufragaron…y llamo a la reflexión a quienes no lo hicieron…!!!
¡¡¡Hasta la Victoria Siempre…!!!Venceremos…¡¡¡Viva la República…¡¡¡Viva Chávez…!!!¡¡¡Viva el Socialismo Bolivariano…!!!!

domingo, 26 de septiembre de 2010

¡A María, Nancy, Ángela y Luis y a todos los EDUCADORES y EDUCADORAS Jubilados!


El pasado sábado 16 de los corrientes, tuve la grata oportunidad de acompañar a mis compañeras y compañeros docentes a recibir la Resolución en un sentido acto donde se acumularon los recuerdos y se recibió las bendiciones cargadas de dicha por el deber cumplido. Homenaje  al que como es de esperarse no asistieron todas y todos los invitados cuando otros y otras no quisieron o no pudieron por razones que sólo Dios y ellas y ellos saben. Ojalá que no sea por rencor, pues que triste sería marcharse de la que fue su casa con dolor y no con la satisfacción y el honor que merece un educador; pero quienes lo hicieron disfrutaron del cariño, la amistad y el respeto de las autoridades educativas y la admiración de quienes como quien escribe siente por muchos ellos, especialmente con quienes compartí luchas, trabajo, conocimiento, sonrisas, discusiones, alegrías y hasta disentí. Este Encuentro no puede ser sólo una FELICITACIÓN sino un AGRADECIMIENTO sincero en nombre de quienes creemos en al Educación y en la Patria. Sin olvidar a Alexis, Manuel, Noel (supervisores de educación de Jóvenes adultos y adultas); a Edgar, Ana, Reinoza (Compañeros del L. B. ¡Andrés Eloy Blanco”); a Clemente (Compañero del L. B. “Vicente Campo Elías”); a Yolanda, Ángel, Freddy, Elsa  (Compañeras (o) del L. N. Ejido); a Deivys (Directora del NER 427); a María Elena, Sandina. Algunos de cuantos vienen a mi memoria en este momento. Quizás otros y otras y otros estaban allí y no los saludé, o se habían marchado. Si es así y les conozco, discúlpenme, mi salutación también va dirigida a ustedes. Especialmente, quiero expresar mi gratitud a quienes fueron nuestras y nuestros compañeros de trabajo en la Supervisión Educativa del Distrito Escolar Nº 1, quienes han recibido la jubilación luego de una larga y fructífera trayectoria educativa. Hoy luego de incansables años de labor, el estado o por solicitud propia, les despide de su trabajo, satisfecho de haber contado con personas como ustedes dentro del proceso educativo. Y no quise dejar pasar el momento para expresar mi tristeza por su partida; hubiese querido contar más tiempo con ustedes, máxime cuando el camino que emprendemos desde allí en favor de una educación liberadora y republicana, recién comienza. Pero así son las cosas. Les corresponde partir y deben hacerle antes que caiga la noche y no pueda vislumbrarse el camino. Agradezco a Dios por haberme permitido compartir y aprender de ustedes durante estos años en la supervisión. Fueron muchos los momentos de trabajo donde, como sabemos, se mezcla la impotencia con la alegría, y la frustración se pasea casi a diario por los pasillos de las instituciones, ante la mirada atónita de quienes acudimos a acompañar el proceso, o cuando esperamos una respuesta oportuna a una sugerencia o a una propuesta luego del deber cumplido; pero de todo hay en al viña del señor. Sin embargo, quiero destacar que fueron muchas las veces cuando el debate era la principal expresión de nuestro trabajo en las reuniones o la visita al plantel constituía una convivencia sincera entre nosotros; un constante aprendizaje o inter-aprendizaje que nunca se olvidará. ¡Gracias a todos, especialmente a usted Profesora María, Profesora Nancy, Profesora Ángela, Profesor Luis! Espero que la V Convención Colectiva pueda significar su experiencia presencia activa entre nosotros como asesores, formadores de generaciones -como la nuestra- que aún tiene mucho que aprender, mientras se continúa abriendo paso en el aprendizaje formal que dicte MPPE. Como olvidar que sin ellos y ellas muchas generaciones no hubiesen encontrado el rumbo a sus vidas, el amor hacia si mismos; como dejar de mencionar que sin sus opiniones acertadas, nuestros errores hubiesen sido mayores o más graves por derecho que tenemos a equivocarnos; como no recordar que sin sus observaciones positivas, muchos conflictos se hubiesen presentado con impensables consecuencias; como no entender sus dudas cuando de actuar se trataba, pues sirvió para evitar actuaciones fuera de la ley; como no agradecer la atención prestada cuando de una sugerencia se trataba; como no añorar sus encuentros para compartir sus experiencias y aprendizajes significativos en el campo de la supervisión. En fin, son muchas e incontables las razones para escribirles compañeros (as), cuando el tiempo se ha detenido para recordarnos de donde venimos y hacia donde vamos. Es una dicha haber estado presente en el Acto que no es un adiós sino un hasta luego, porque  como escribió Miguel Otero Silva al referirse a Jesús de Nazareth, ustedes…”! ¡Vivirán por siempre en la sonrisa de los niños, en la liberación de los pueblos, en la sabia profunda de la humanidad, en el consuelo de los afligidos, sí, en el amor sin lágrimas”! ¡Vivan los Educadores (as)! ¡Viva la Educación Bolivariana! ¡Patria…Socialismo o Muerte…Venceremos!

sábado, 25 de septiembre de 2010

SUPERVISIÓN PEDAGÓGICA

Concibo la Supervisión como el arte de transformar el proceso educativo en un elemento absolutamente pedagógico, interdependiente académicamente, de cuanto hacemos o dejamos de hacer en nuestra acción diaria. Con ella se construye el proceso educativo. El artículo 43 de la LOE dice: “El estado formula y administra la política de supervisión educativa como un proceso único, integral, holístico, social, humanista, sistemático y metodológico, con la finalidad de orientar y acompañar el proceso educativo, en el marco de la integración escuela-familia-comunidad, acorde con los diferentes niveles y modalidades del sistema educativo. Se realizará en las instituciones, centros, planteles y servicios educativos dependientes del Ejecutivo Nacional, Estadal y Municipal, de los entes descentralizados y las instituciones educativas privadas, en los distintos niveles y modalidades para garantizar los fines de la educación consagrados en esta Ley. La supervisión y dirección de las instituciones educativas serán parte integral de una gestión democrática y participativa, signada por el acompañamiento pedagógico”. Mi labor como supervisor encargado me ha permitido tener una idea más clara de cómo debería ser ese proceso. Mi experiencia como Coordinador Titular - cargo que obtuve por concurso de oposición -, me dio el método. El trabajo en equipo, al menos así logré trabajar con las profesoras Matilde Chacón y Judith Villasmil en la Parroquia “Juan Rodríguez Suárez”. El esfuerzo se traducía en una supervisión más pedagógico-administrativa cada día. No basta decir que lo administrativo contribuye con lo pedagógico porque eso todo el mundo lo sabe. “El estado formula y administra la política de supervisión educativa”, pero la falta de orden y organización o mística, o de todo un poco, las hacen chocantes, avasalladoras, y hasta meros requisitos.  El rol de mensajeros que cumplen los directores y al que se suman los supervisores, deja de lado el verdadero sentido de la supervisión, tal como lo dije al iniciar el escrito: el arte de transformar el proceso educativo. El director que tiene tiempo y espacio para visitar el aula, ante la dinámica impuesta por del ente rector de la educación, es un artista de la educación. Sólo conozco a un director que lo hace y muy bien. Espero que algún día en uno de los encuentros pedagógicos bolivarianos comparta su experiencia. Sobre todo en qué momento lo hace y cómo, para motivar a otros colegas a ser partícipes del proceso transformador y no sólo espectadores del “arte de enseñar” como dice el concepto que nos enseñaron de la didáctica. Sería muy bueno desde el punto de vista pedagógico contar y conocer lo que significa esa experiencia. Y no hablo de quienes lo hayan hecho para cumplir con el requisito de una tesis. Hablo del trabajo específico de acompañamiento y coadyuvancia del proceso educativo. El aula espera por los directores, subdirectores, coordinadores y supervisores para saber y conocer: cómo se dirige el docente al estudiante, cómo da la clase, cómo se desplaza en el aula, cómo escribe en la pizarra, cómo aplica las estrategias pedagógicas, cómo inicia la actividad y cómo la culmina; para luego comprobar cómo planifica la evaluación. A ver si no da la clase de una manera y  evalúa de otra. Sólo así sabremos qué tipo de docentes tenemos y cuál necesitamos para “Orientar y acompañar el proceso educativo”. Los Consejos de Docentes y los Consejos de Supervisores deben superar el concepto de reuniones y funcionar en comisiones: Infraestructura, PAE y Salud, Asoc. Civil, PEIC, Proyecto de Aprendizaje, Trabajo Comunitario, Política Educativa, entre otras. Hay que superar la división que existe en las parroquias donde las instituciones viven en una constante lucha por sobrevivir como una isla. Para ello propuse ante los colegas supervisores del Distrito Escolar Nº 1, ante los colegas del Distrito presentes en el 2do Congreso Pedagógico Bolivariano, ante la comunidad de la Parroquia “Lasso de la Vega”, y en encuentro de saberes organizado en la Parroquia de “Gonzalo Picón Febres”, que contó con la participación de la comunidad, la conformación del CONSEJO DE EDUCACIÓN PARROQUIAL, como una manera socialista de lograr laintegración escuela-familia-comunidad” y organizarnos desde allí, luchar juntos, crecer juntos; trabajando juntos, partiendo del principio fundamental del socialismo del siglo XXI: la inclusión. Pero llegar a esto requiere cambio de paradigmas, y avanzar en la construcción de una “gestión democrática y participativa” que derive en la planificación y ejecución de políticas educativas acorde con la realidad de cada comunidad. También hice entrega al jefe superior inmediato y ante algunos colegas supervisores, la PROPUESTA: FORMACIÓN PARA COORDINADORES SUBDIRCTORES Y DIRECTORES EN EJERCICIO Y ASPIRANTES, EN EL MARCO DE LA EDUCACIÓN BOLIVARIANA. El temario sería: Proyecto Nacional “Simón Bolívar (2007 2013), Pensamiento Político Bolivariano, Alta Gerencia Socialista, Crecimiento Personal, Funciones, Normativa Legal y Procedimientos Administrativos y Trabajo Comunitario. Esta formación se podría dar en reuniones o encuentros semanales, a través de módulos teórico-prácticos con una duración no superior a 32 horas ni menor a 16, de acuerdo a la planificación que se desarrolle en el Municipio o Distrito Escolar. Los formadores, sin duda, deben ser los supervisores y docentes en ejercicio y quienes estando jubilados pudieran colaborar. Esto con el objeto de corregir un error: no se ha formado al personal directivo y no directivo con el cual interactuamos; o al menos, no nos consta que ese proceso se haya llevado a cabo; por tanto no podemos asegurar que las fallas detectadas se debe a impericia o negligencia. Cuando hayamos realizado la tarea, que, además está dentro de nuestra función supervisora, podremos actuar con mayor propiedad, como lo hemos hecho cuando dictamos un taller, damos unas orientaciones y luego vamos a recoger lo sembrado y observamos que él director (a) o la directiva no ha procedido como debe ser. Para esto es necesario contar con un supervisor que haya vivido y experimentado las distintas etapas del proceso educativo; que se transforme en ser integral de manera progresiva, no sólo a partir de formación permanente, previa a asumir su responsabilidad como supervisor, que no debe ser inferior a un año, sino del cúmulo de experiencias que se van dando en la medida que avanza en su labor, atendiendo instituciones de distintos subsistemas, niveles o modalidades. Al cabo de tres años se podría decir que ha adquirido las herramientas básicas necesarias para acompañar el proceso educativo en forma efectiva y eficaz. No se trata de una carrera contra el tiempo como quieren hacerlo ver algunos, especialmente quienes desconocen el proceso pedagógico en su trascendencia. Se trata de activar como dije el Plan de Formación para todos los Responsables de la Administración Escolar y organizar un Consejo de Supervisores que por medio de comisiones dé respuesta oportuna a las situaciones que a diario vive el sector educativo; un consejo abierto al debate; un consejo que trabaje en equipo; un consejo que presente informes no para archivar sino para discutir, mejorar; un consejo que sea capaz de hacer propuestas; un consejo que haga realidad las palabras de nuestro Comandante-Presidente Hugo Chávez: “no podemos estar de espaldas a la Ley; seguir permitiendo que leyes de la cuarta república, inclusive de la quinta, bloqueen el camino hacia la construcción del socialismo”; un consejo atrevido; que interprete el verdadero espíritu de la Ley, pero que no se quede encerrado en ella; un consejo que aproveche las potencialidades que existe en el grupo de docentes con función supervisora, aplicando una estrategia inclusiva y vinculante, que supere la idea de que con tener 5 ó 6 instituciones el “yo supervisor” va a realizar todo el trabajo. Eso es una falacia. Si la supervisión no está “signada por el acompañamiento pedagógico”, no es supervisión. Y no lo digo yo, lo dice la LOE. Aquí recuerdo la anécdota que contaba el jefe de zona cuando entró a un aula y se encontró con un niño de 5to grado que no sabía escribir el nombre; o la que yo escuché a una representante cuando le contaba a su esposo que había cambiado a su hija de turno porque entre otras cosas cuando entró al aula, observó que el texto escrito en la pizarra por la maestra que sería la responsable de la educación de su hija, la faltaban n, s, b… Imagínese la impresión de esa mamá dejar el futuro de su hija en manos de alguien así. Hasta el momento la supervisión ha sido sistemática, metodológica, humanista, administrativa… Hemos cumplido con la entrega de recaudos al momento. Se ha hecho un acompañamiento pedagógico, efebológico y andragógico; según se ha tratado de atender situaciones donde aparece involucrado el niño, niña, adolescente o adulto y adulta. Y se ha hecho bien, por demás. Pero hay una asignatura pendiente: el aula. Por eso cuando escucho que ahora los supervisores deben asumir una coordinación de formación permanente, PAE, Pedagógica… además de su labor, algo que avizoraba y le había comentado a algunos compañeros: supervisores toderos, más creo en la propuesta de trabajar en comisiones que, envestidas del principio de autoridad, se muevan libremente por todo el municipio realizando su labor y entregando cuentas a una asamblea permanente o general de consejeros supervisores que se convertiría en la máxima expresión de la supervisión. Palabra que, por cierto, algún día habrá que cambiar por una más socialista, más de pueblo, más de nosotros, y con menor sentido de superioridad. ¡¿No creen?! ¡Patria…Socialismo o Muerte…Venceremos…!